Laura Ramírez es la artífice de estas mezclas mágicas de chiles, especias y amor que se convierten en exquisitos moles elaborados artesanalmente y que son un reconocimiento a los padres de la maestra en moles Laura, haciendo de Moles Galdi un tributo al esfuerzo por brindarle educación y ejemplo de vida a ella y sus 5 hermanos. Es así que a partir de estas enseñanzas de vida surge la marca, el sueño y el logro de crecer en la más bella ciudad de México: San Miguel de Allende, donde se ha encontrado el apoyo, reconocimiento y preferencia de nuestros clientes que regresan de todas partes por estos deliciosos productos.